El gato de Schrödinger o como putear a un lindo Botas de Futbol Adidas.
A un señor llamado Erwin Schrödinger, (no sé vosotros, pero yo seguro que lo pronuncio mal) se le ocurrió un día idear un experimento Fuente.
No se le ocurrió otra cosa que meter un gatito en una caja cerrada, caja en la que además había un frasco de veneno, que se rompía si una partícula radiactiva se desintegraba o no.
Imaginaros la situación. Que se desintegra la partícula,..........pues gato "caput". Que no se desintegra,..........pues a seguir cazando ratones.
Resulta que mi amigo Erwin (eso de amigo es pura cortesía, que más de un dolor de cabeza me ha producido y desde lo del gatito como que le tengo manía,............uno que no soporta ver sufrir a los animales), decía que en base a probabilidades cuánticas, el conjunto formado por el gato y el, digamos, sistema de aniquilación, era lo que los físicos llaman una mezcla de estados. Usease, que el conjunto era una mezcla de dos posibilidades: gato vivo y gato muerto. Sí, ya sé, a mi también me han llamado alguna que otra vez "colgao".
Pero eso no termina ahí. Decía que sólo si se observaba el interior de la caja, esa mezcla de estados (en terminología cuántica) colapsaba a un estado, y sólo entonces sabriamos sobre la suerte del felino. Vamos, que uno mira por curiosidad y lo mismo se ha cargado el animalito que se lleva un zarpazo en la cara.
Pero bueno, al igual que los matemáticos, los físicos no son gente seria. Al fin y al cabo la mecánica cuántica tiene muchas interpretaciones (a cual más desconcertante) y el experimento es sólo mental..................¿Qué?, que qué le pasó al gato de la foto................. Iré a mirar.
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